1. Tamizar la harina sobre la mesa de trabajo con ayuda de un colador y reservar un poco para extender la masa.
2. Ablandar la mantequilla e incorporarla a la harina tamizada.
3. Añadir la miel, los piñones picados y las yemas. Amasar y dejar reposar 1 hora.
4. Extender la masa con un rodillo y darle un grosor de 5mm aprox. Cortar trozos de la masa con un molde en forma de galleta y ponerlos en una placa de horno.
5. Pintarlos con huevo batido y hornear a 180 grados C durante 10 a 15 minutos.